Siempre pensé que trabajar en un banco era algo elitista, no me imaginé nuca que llegaría a entrar a uno como personal de trabajo, por qué? porque creí que este tipo de trabajos era para gente “power” que comienza su camino laboral de manera distinta al mío.
La verdad es que después de un mes puedo dar mis primeras impresiones y la cosa es muy distinta de lo que pensaba.
No es un lugar elitista, es sólo que mucha gente se cree elitista, como aquellas personas que hablan con “la papa en la boca”, pero dicen "shusha" o señor guardia, por favor, me baja el aire que “la calor” me tiene aborchonada plisss???. Esas personas que no saludan a la niña del aseo en su cumpleaños, por ser la que lava las tazas y sirve los cafés. Esas personas que si te ven con la relación cercana con la gerencia… te tratan, sino no importa quien eres ni que haces, pero no todos son iguales.
En este lugar convergen un sin número de clases sociales. Es como un tipo de Arca de Noé para estos tiempos en donde todos quieren salvarse con el jefe. Está el que viene de Cerro Navia que debe tomar el transantiago una hora antes para llegar 10 para las 09, y el que viene saliendo de la costanera norte que tomó en La Dehesa con una vista panorámica de las entrañas de la cuidad. Claro que no falta también el que viene del barrio ABC1 emergente del Parque Forestal, obvio. Pero teniendo un mismo destino, por lukas más o lukas menos, ninguno de ellos se mezcla. Esto me lleva a pensar que existe un relevante clasismo que no había visto antes en ningún otro lugar de trabajo.
El individualismo es algo cotidiano y por más que el junior me entrega revistas, folletos, cartas y demases del presidente de la Cia abogando por el trabajo en equipo y por un mismo fin, no logro ver ningún rasgo cercano a esto.
El Cambio de Vida… a veces es un poco duro y te enseña cosas nuevas, pero, creo, de todas ellas debes aprender.
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